De cada 10 trabajadores 9 se ven afectados
PDVSA deja sin recursos a pescadores Venezolanos
La estatal petrolera, Petróleos de Venezuela S.A, ha saneado a un 60% incidente de crudo en las costas venezolanas. Sin embargo, cinco meses después, este hecho está afectando gravemente a la industria pesquera por la muerte de la fauna submarina.
Marialaura Durán, Arianna Matheus y Vanessa Espinoza
Marialaura Durán, Arianna Matheus y Vanessa Espinoza
El 23 abril se produjo un derrame de 300 barriles de petróleo en la
refinería Pointe-à-Pierre, ubicada en Trinidad y Tobago. El
crudo se ha arrastrado a las costas venezolanas y esparcido en las playas y
litorales de los Parques Nacionales de la Península de Paria, el Archipiélago
de Los Roques, las costas de Delta Amacuro, la Isla de Margarita y el Parque
Nacional Turuépano, afectando a gran parte del
sector pesquero del país.
A pesar de que PDVSA activó un plan de saneamiento dos días después e informó, el 10 de mayo, que se registraba 60% de limpieza en la zona. Miguel Hernández, comerciante de 23 años, dice que no es así. Su padre es pescador desde que tiene memoria y debido a la gran contaminación por crudo perdió su única fuente de ingreso.
“Nosotros tenemos un negocito aquí en Bahía del Morro, además de vender pescao, vendemos redes y anzuelos que fabricamos nosotros mismos… pero con esta contaminación quien nos va a comprar algo si nadie puede pescar.”
“Nosotros tenemos un negocito aquí en Bahía del Morro, además de vender pescao, vendemos redes y anzuelos que fabricamos nosotros mismos… pero con esta contaminación quien nos va a comprar algo si nadie puede pescar.”
Explica que las redes
quedan atrapadas en el mar por la gran cantidad de petróleo. “Ahora ni se pesca
ni se produce nada… la mayoría de los peces están muertos”
También expresó que
varios de sus botes se dañaron, debido a que el crudo se inserta en las aspas
del motor y lo dañan, “se podría corregir con mantenimiento, pero ahorita todo
está muy costoso”.
El
estado Sucre ha sido el más afectado por este incidente petrolero, ya que la
pesca es el principal sustento de la zona. Sus pescadores generalmente logran
obtener del mar 500 kilogramos de pescados.
“Obteníamos buenas
ganancias aquí en la Bahía, pero ahora nos cuesta mucho pescar”, explica
Dalmito Aponte que nació en Catia y se trasladó a la Isla de Margarita a vivir
con sus abuelos, Chucho y Maricarmen, cuando su padre murió, “Me mudé a los
cinco años con mis abuelos, mi abuelo era pescador, así que me crié en ese
mundo del pescado”.
Explica que ahora por
la contaminación de crudo, la mayoría de los peces por la zona están muertos o
sino “el mar está manchado de negro, así no se puede.”
Familias
sin sustento
Al igual que Miguel y Dalmito, Fernando Yepez desde pequeño se crió entre pescado y cebo. El negocio de su familia le permitía tener sus tres comidas diarias, merendar e ir a la escuela, que ahora con sus 30 años de edad ve como “lujos”.
Fernado Yepez, comerciante de pescado, dice que las pocas ganancias que obtiene son para “más o menos sobrevivir”. Hace tres años las ganancias que obtenía le permitían pagar las cuentas de su hogar, la escuela de sus dos hijos, mantener su carro y hacer un mercado, pero “la situación del país no me deja, sumándole a eso que ahora debo hacer malabares para poder obtener mercancía, todo es más difícil.”
“El poco pescado que se encuentra en el mar está enfermo, ya no puedo mantener a mi familia… así estamos varios, no sabemos que hacer”.
Poca inversión
El
dirigente de la Federación Única Nacional de Trabajadores Petroleros de
Venezuela, José Bodas, explicó que las instalaciones de la estatal están en
malas condiciones por la falta de mantenimiento.
Así
mismo, Henry Cardozo, ingeniero químico de la petrolera venezolana, comenta que
“hoy en día es muy difícil solventar un derrame, por el simple hecho de que no
hay como hacerle mantenimiento a las tuberías y mangueras de las plataformas, y
estas son las encargadas de mover el crudo”.
Explicó
que actualmente PDVSA se encuentra en un gran declive económico que está
afectando a todo el país y no solo a los “pecesitos”.
A pesar de esto, en
Venezuela el último accidente petrolero registrado, anterior al de este año,
ocurrió en el 2012, cuando en el río Guarapiche,
principal surtidor de agua del estado Monagas, se vertieron aproximadamente
5.000 barriles de petróleo.
Derrames constantes
En la cuenca del Lago de Maracaibo, se registran entre 40 y 50 filtraciones diarias, y según cifras del Ministerio del Ambiente, se ha llegado a producir 1.800 derrames de crudo en los últimos 10 años.
Marcelo Monnot, presidente del Centro de Ingenieros del estado Zulia, afirma que 300 kilómetros, de los 800 kilómetros que componen las costas del lago, están contaminadas por crudo.
“PDVSA es el principal responsable de este deterioro ambiental porque la falta de mantenimiento a la infraestructura petrolera como las líneas, pozos, estaciones de flujo, la falta de protección en las tuberías son las causas de este derrame de petróleo en el Lago de Maracaibo… cuando se rompe una tubería le colocan una grapa y colapsa por otro lado”, explica Monnot.
Por otro lado, expone que de los 1.500 kilogramos diarios que antes los pescadores lograban capturar en la región zuliana, hoy en día solo consiguen 50 kilos.
Costas del Lago de Maracaibo. Año 2016
(Foto cortesía de: Diario Contraste)
Peces
sin aire
La fauna marina
ha sido la más afectada tras este hecho, la mayoría de estos animales mueren
asfixiados ya que el crudo se adhiere a sus rostros y no les permite respirar.
También los arrecifes, que sirven como sustentos para los animales, y lo manglares donde se encuentran
langostinos y ostras, se ven afectados.
Ostras contaminadas por derrame petrolero
(Foto cortesía de: El Universal)
Ante esto, 61 ONG
venezolanas se manifestaron en relación al hecho ocurrido y explican en el
portal web de la ONG Vitalis la gravedad de esta problemática, entre las cuales
se reflejan:
· Afectación
y muerte del ecosistema marino costero.
· Cambios
inmediatos y a largo plazo en la calidad del agua.
· Reducción
del oxígeno disuelto, incremento de CO2 y de la temperatura.
· Agua no
apta para consumo animal ni humano.
· Pérdida
de la biodiversidad, considerando que las costas orientales del país tienen
alta producción pesquera y se verían afectados los recursos pesqueros y
alimentarios de los cuales dependen miles de personas en nuestro país.
· Las
especies que tengan contacto con el petróleo no estarían aptas para el consumo
humano.
· El
petróleo puede permanecer a largo plazo en las arenas y comprometer seriamente
el ecosistema
Exigen repuesta de parte del Gobierno Nacional “para
solucionar este problema que podría traer graves consecuencias en la vida de
miles de venezolanos”.
Así mismo, la
Comisión Mundial de Áreas Protegidas de la Unión Internacional para la
Conservación de la Naturaleza (UICN) en un comunicado oficial, pidió a las
autoridades competentes solventar el problema.
Por su parte, la Comisión Mundial de Áreas Protegidas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) ha expresado su preocupación al respecto y exige respuesta del gobierno nacional y de la exportadora de petróleo.
Ante esto, PDVSA
informó en sus notas de prensa que se “intensificaría” el Plan de Contingencia para controlar los Derrames de
Hidrocarburos.
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