Los afectos al gobierno chavista también sufren los embates de la crisis económica (Foto cortesía: impactona.com) |
Jorge Briceño, Blasysmar Márquez, María González.
La nación de Bolívar es conocida por poseer cantidades de riquezas a su favor, por ejemplo: una gran biodiversidad en el planeta, sus paisajes que van desde el mar caribeño, hasta los andes nevados, desde la selva hasta el desierto, las mujeres más bellas y muy especialmente por tener la reserva petrolera más grande del mundo, la cual podría cubrir la demanda de Estados unidos en 70 años y es aquí donde entramos en contexto y nos hacemos la pregunta: ¿Qué pasó con la “Venezuela Saudita”?
“Venezuela Saudita”, es
el epíteto con el que se le conoció a la Venezuela de los años 70, sobrenombre
causado por la bonanza petrolera y la prosperidad que generó dicha ganancia, la
cual recordaba a la de los países árabes, mientras que el resto del hemisferio
occidental vivía una de las peores crisis petroleras de la historia, todo esto
sucedió en el primer gobierno de Carlos Andrés Pérez quien decidió nacionalizar
la industria petrolera.
Con 297.570 millones de
barriles de petróleo vendidos hasta diciembre de 2011, Venezuela es el quinto país exportador de petróleo y
el poseedor de las mayores reservas probadas de crudo pesado del mundo.
Según el Ministerio del
Poder Popular para el Petróleo en su boletín “Petróleo y Otros Datos
Estadísticos” (PODE) en la edición de 2014, última publicada por el ministerio,
Venezuela había exportado ese año un promedio de 2.329 barriles diarios a
un precio medio de USD 56,80 por barril, para alcanzar un total de 850.049
barriles de petróleo al finalizar el año, para una ganancia de USD 48.282.783 aproximadamente.
En la actualidad, los entes
gubernamentales no publican cifras o datos de cualquier índole, ya sea
económico o social, varios de éstos lo
dejaron de hacer en 2015.
La nación sudamericana pasa
actualmente por una crisis sociopolítica
y económica terrible, acompañada por una inflación catastrófica, donde la
escasez refleja todo lo contrario al abundante oro negro que se deposita en el
subsuelo.
Empresas quebradas, Trasnacionales
que se van del país como los jóvenes que no ven futuro en su patria y se ven en
la necesidad de partir a nuevas tierras en búsqueda de un sueño que no pudieron
cumplir en Venezuela por muchos factores, entre ellos: La inseguridad, la crisis política y la inestabilidad económica que
ha dejado hospitales desabastecidos, supermercados vacíos y por ende las
alacenas, lo que ha hecho que muchos venezolanos dependan de las cajas del CLAP (Comité Local de
Abastecimiento y Producción) repartidas por el gobierno, y otros ciudadanos que
no corren con la misma suerte, terminen comiendo
de la basura.
Pareciera que Venezuela pasó
de ser uno de los países más prósperos de América a uno de los más pobres con una velocidad increíble desde que inició
la crisis en 2013, ¿Por qué?
El Instituto nacional de
estadística (INE) publicó cifras para agosto de 2016 donde señala que el 33,1%
de los hogares en el país estaba en
condición de pobreza para los primeros
seis meses del año 2015, estando 3,6 puntos más arriba a comparación con el
primer semestre de 2014.
Venezuela es miembro de la Organización de Países Exportadores de
Petróleo (OPEP) donde tiene un puesto importante ya que es uno de los
miembros fundadores, a esta organización se le suman los Emiratos Árabes Unidos, país donde se encuentra la vibrante y
pujante Dubái, los venezolanos de a pie se preguntan ¿Por qué si exportamos más
petróleo que Dubái cómo es que no estamos como ellos?
Según Observatorio de
Complejidad Económica (OEC por sus siglas en Inglés) Venezuela realizó exportaciones en 2015 con un valor de 34,3 mil
millones de dólares e importaciones en un saldo de 27,5 mil millones,
dando como resultado un resultado comercial positivo de 6,82 mil millones
de dólares.
Por su parte, los Emiratos
Árabes Unidos en el mismo año realizaron exportaciones
en 147 mil millones de dólares e importaron 217 mil millones
de dólares.
Para finales del año 2015,
Venezuela cerró con una inflación del
270,7%, mientras que los
Emiratos cerraron el año con una inflación del 2,5%.
Para
el año 2016, el Producto Interno Bruto venezolano cerró en 427.326 millones de
dólares, su par petrolero, Emiratos Árabes cerró ese mismo año con 347 millones
de dólares, esto según el Banco Mundial.
Son los venezolanos quienes
sufren a diario los resultados de estas cifras, como José (Nombre
ficticio para resguardar al ciudadano) quien perdió a su hermano por falta de medicamentos, José relata: “Mi
hermano fue infectado por hepatitis luego de que tuvieran que operarlo de
emergencia por una apendicitis a mediados de los 90, le hicieron una trasfusión
de sangre y la sangre venía infectada con la hepatitis”.
José cuenta que a pesar de esa situación vivida, su hermano vivió una vida normal hasta que empezaron a escasear las medicinas: “Él (su hermano) vivía tranquilo con su condición, se tomaba su medicina, y cada varios meses tenía que ir a Maracaibo a chequearse con el médico, pero al no tener las medicinas comenzó a fallar con el tratamiento y se fue empeorando, gracias a Dios tenía amigos aquí en Venezuela como en el extranjero que le mandaban de vez en cuando la pastilla, pero llegó un momento donde no se consiguió más”. El hermano de José falleció en agosto debido a una falla en su hígado.
¿Por qué en uno de los
países más exportadores de petróleo escasean los medicamentos? La voraz
inflación que según el Fondo Monetario Internacional (FMI) cerrará este año con un 720%, ha hecho que medicamentos genéricos
que en 2013 costaban 5 Bs.F. Hoy estén aproximándose a los 200 Bs.F.
Venezuela cuenta con cuatro
sistemas cambiarios, lo que hace difícil que el ciudadano y muchas empresas
puedan percibir dólares, por lo cual optan por conseguir divisas de un mercado
negro.
El diputado José Guerra, Presidente
de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional (AN) aseguró que uno de los
mecanismos para mejorar la economía en la nación es la unificación de los tipos
de cambio.
Como el hermano de José,
muchos venezolanos viven situaciones similares y hasta peores, la historia de
José se repite muchas veces en Venezuela, pero ¿Podrá salir adelante? Es otra
de las grandes preguntas de los venezolanos.
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